Sus paisajes, su comida y su historia hacen parte del porqué visitar este destino. La ciudad más antigua de América del Sur fue fundada por el español Rodrigo de Bastidas en 1525. De sus orígenes se conservan amplias casonas en el centro de la ciudad que han sido restauradas y que son una invitación para el turista a hacer un recorrido por la historia.
Su importancia histórica: En la Hacienda Florida de San Pedro Alejandrino, falleció el Libertador Simón Bolívar, héroe de la patria de cinco países de América Latina, el 17 de septiembre de 1830.
La última morada del prócer funciona como un museo donde se pueden apreciar objetos de la época, como por ejemplo su habitación, la biblioteca, el sótano y la destilería que tenía fines industriales y servía como sustento a la familia De Mier, propietaria de la mansión en esos tiempos. La ciudad también alberga paseos peatonales, parques centenarios, casas coloniales y monumentos que valen la pena ser recorridos cuando se tiene la oportunidad de pasar una temporada de descanso en la ciudad.
La comida: En general la Costa Atlántica goza de una excelente gastronomía. Y Santa Marta no puede ser la excepción. Ofrece desde la rica ‘arepa e’ huevo’ acompañada de ají y un refrescante jugo de níspero o zapote, hasta el pargo rojo frito con patacón y suero costeño. Toda clase de platos típicos del mar se encuentran acá. También tiene oferta gastronómica para los visitantes de varias regiones del país. Restaurantes paisas, rolos, santandereanos, comidas rápidas de cadena hacen presencia en este destino.
La diversión: Santa Marta ofrece varias alternativas para la rumba. Usted puede caminar tranquilamente con su pareja o grupo de amigos por el malecón de El Rodadero, disfrutar de una parranda vallenata en la playa mientras deciden en qué sitio van a rematar la noche. Después irse a Santa Marta, al Parque de los novios, donde funcionan los nuevos sitios de rumba o escoger alguno de los bares para tomarse unas cervezas frías en buena compañía y charla agradable. La ciudad también es centro de numerosos conciertos que se realizan durante todo el año. Y si de veras quiere sentirse en carnavales no puede perderse las Fiestas del Mar, las más importantes del año y que en esta ocasión se celebraron entre el 29 de julio y el 1 de agosto.
Los paisajes: Por estar junto a la Sierra Nevada de Santa Marta, es punto de partida para ir a sitios hermosos de la geografía colombiana como Bahía Concha, Neguange, Taganga (con sus playas para practicar el buceo), el Parque Tayrona, Ciudad Perdida, Cabo San Juan, Arrecifes, entre otras playas y bahías que hacen parte de su oferta turística. Es además la oportunidad de compartir con la cultura indígena del departamento y de conocer sus artesanías. Pueblito, también conocida como Chairama hace parte de las 200 ciudades prehispánicas descubiertas en Santa Marta.
La gente y su cultura: El samario es de buen trato hacia el turista, amable, comparte una conversación como si conociera al interlocutor de toda la vida. Es amigable y seguramente lo encontrará dispuesto a ayudarlo en lo que necesite. Tal vez la pequeñez de la ciudad ayuda a que la desconfianza sea poca y que se preste para llevarlo a los mejores sitios para comer, picar, tomarse unos cocteles, ir en plan de paseo o cultural, familiar o en pareja.